Inspirado por lo que hoy conocemos como juegos de mesa, pero que han estado presentes en la cultura humana por milenios, Mystic Pillars nos presenta una serie de desafíos muy interesantes con una mecánica simple y directa.
Los "juegos de mesa” modernos tienden a ser complejos, con múltiples reglas y muchas veces una curva de aprendizaje alta. Como contraste, los juegos de mesa clásicos se caracterizan por tener reglas muy sencillas que abren un abanico de posibilidades enorme y apelan a la resolución de problemas de manera creativa. Si pensamos en Dominó, Ludo, Damas y decenas de juegos de cartas/naipes podemos ver que es posible aprender su mecánica en pocos minutos, pero dominar con maestría una partida puede tomar años. Incluso juegos como el Ajedrez o el Go parecen ser simples, pero las combinaciones de jugadas son virtualmente infinitas.
"Mystic Pillars” apela a ese tipo de juegos, manteniendo las proporciones con los gigantes clásicos ya mencionados. En este caso en un antiguo tipo de juego llamado “Mancala”.
Todo parte con una historia ambientada en la antigua India, presentando poco a poco una narrativa que avanza junto con nuestro progreso en el juego. En cada fase se nos muestra una aldea donde debemos restablecer el caudal de un río que de una forma u otra le devuelve la vida. Para que el agua vuelva a su cause debemos derribar un conjunto de pilares solo usando nuestro ingenio.
Y aquí entran los puzzles. Cada etapa presenta una serie de "pilares”, cada uno con un número de gemas en su parte superior. La mecánica es simple: las gemas se pueden mover entre los pilares de acuerdo a la distancia entre ellos. Si muevo gemas de un pilar a otro adyacente, podríamos decir dando un solo "paso”, solo se mueve una gema. Si se desea mover gemas a un pilar a dos “pasos” de distancia, se mueven dos gemas. Entonces el desafío es lograr mover las gemas entre los pilares para alcanzar una distribución objetivo sin sobrepasar una cantidad máxima de movidas. En la siguiente imagen, debemos mover gemas desde una configuración inicial "5-0-1” a "3-0-3”, es decir, mover dos gemas desde el primer pilar al tercero (lo cual se puede lograr con una sola movida).
Al cumplir un desafío los pilares se derrumban y el rio avanza en su curso. Mientras más se avanza, nuevas partes de la historia que acompaña a este juego se van develando y se descubren nuevas aldeas que necesitan de nuestra ayuda. Es una historia interesante, narrada en Kannada, que nos presenta elementos de la rica tradición del subcontinente Indio.
Los puzzles iniciales son bastante simples, pero pronto se vuelven complejos y requieren estrujar nuestra materia gris para lograr cada objetivo. Se agregan algunas variaciones en el camino, como la posibilidad de mover gemas en una sola dirección y un aumento en la cantidad de pilares. La dificultad aumenta de manera gradual pero se mantiene en niveles razonables.
Una muy buena opción para quienes gusten de los puzzles simples pero desafiantes. Mi única advertencia es que puede volverse un poco monótono ya que la mecánica no varía demasiado entre cada aldea. Pero es perfecto para jugar un par de etapas al día como un ejercicio mental que, una vez dominado, solo tomará unos minutos.
Mystic Pillars está disponible para iPhone y iPad, Android, PC (a través de Steam), Nintendo Switch y Playstation.
La vista de puzzles me recuerda estéticamente a Monument Valley.
Estoy intrigada, así que lo probaré 😊