Death Stranding - Director's Cut
Una revisión a esta joya de Hideo Kojima mientras esperamos su secuela, "Death Stranding 2: On the Beach".
Bienvenidos a El Jugador Solitario, un lugar donde cada semana recomiendo un juego de esos que pueden ser disfrutados en solitario. Más que reviews, comparto información suficiente para intentar entusiasmar a lectores y lectoras a invertir tiempo en estos.
Death Stranding es una super producción de Kojima Productions lanzada en 2019 marcando un hito en la industria de los video juegos, como casi todo lo que hace Hideo Kojima. Con el inminente lanzamiento de su esperada secuela, Death Stranding 2: On the Beach, me parece un momento ideal para revisar esta verdadera obra maestra del director nipón. En particular, aproveché la oportunidad para jugar la edición “Director's Cut”, lanzada en 2022 con una serie de mejoras y nuevos contenidos.
Más allá del abultado elenco de estrellas que dan vida a caras y voces en Death Stranding (Norman Reedus, Mads Mikkelsen, Lea Seydoux y Guillermo del Toro, entre otros) y de la excelente banda sonora provista por el grupo Low Roar, este juego sobresale por el titánico mundo secundario que nos presenta. Tiene tantos elementos propios y originales que sería imposible cubrirlos en una breve nota como esta. Bueno, aquí va mi mejor intento.
Death Stranding nos transporta a un mundo post-post-apocaliptico, ya que la sociedad ha vuelto a ponerse en pie tras una catástrofe global. El evento destructivo en cuestión se devela poco a poco a medida que avanza la historia, pero en resumidas cuentas estamos en un mundo donde los muertos se ven imposibilitados de transitar al plano de existencia que les corresponde. La metáfora utilizada es la existencia de “playas”, limbos personales o grupales al que van las almas antes de seguir su camino. En esta historia, la muerte ha varado en dichas playas (de ahí el título del juego), manteniendo a los espíritus atascados en un limbo que poco a poco permea hacia el mundo de los vivos.
La rotura del equilibrio natural entre vivos y muertos ha generado la peligrosa coexistencia de dos dimensiones opuestas. Los espíritus o “entes varados” (BTs, Beached Things) se han colado en nuestro mundo y traen consigo anti-materia, que al entrar al contacto con nuestra realidad generan enormes explosiones que arrasan todo a su paso. Cada vez que un humano muere, su espíritu queda varado en la playa; al no poder cortar el lazo con el mundo terrenal, el espíritu colisiona con su cadaver necrótico y produce una “explosión de vacío” que desintegra todo en derredor. Para evitar el contacto con estos entes, la corporación Bridges junto al gobierno de las “Ciudades Unidas de America” (que ha reemplazado a los Estados Unidos) han creado los BBs (Bebé Bridge), niños no nacidos insertados en cápsulas amnióticas que sirven de enlace entre los vivos y los muertos. Estos “dispositivos” pueden ser utilizados para detectar la presencia de BTs.
Es en este contexto que conocemos a Sam Porter Bridges, otrora miembro de una influyente familia, ahora dedicado al sacrificado oficio de transportar paquetes de un lugar a otro. Tras los eventos del "death stranding" y las explosiones generadas por cientos de muertes naturales que terminaron en vacíos de materia/anti-materia, la población vive ahora bajo tierra en profundos bunkers. Por esto, dependen de “portadores” para conseguir alimentos, materiales, artefactos y cualquier otra cosa que no puedan generar por sí mismos. Sam tendrá la misión de reconectar las ciudades de norteamérica, una entrega a la vez.
Esta tarea es especialmente difícil ya que el death stranding trajo consigo el chiralium, una partícula que se origina en las “playas” y que ha contaminado la atmósfera terrestre. Esta partícula tiene propiedades que desafían las leyes de la gravedad y el tiempo, provocando lluvias que aceleran el paso del tiempo en todo lo que toca. Por ende, los vehículos y paquetes que transportan los portadores se degradan rápidamente. El chiralium se acumula en la superficie formando cristales que asemejan manos extendiéndose al cielo, y que puede ser recolectada como combustible para innumerables fines.
¿Suena complejo? Pues lo es.
El mundo de Death Stranding es un tejido difícil de desenmarañar, cuya total compresión escapa a mis capacidades cognitivas. Está lleno de metáforas, alegorías, reflexiones e incertidumbre. Sus creadores nos proveen toneladas de textos y audios que hablan de este mundo surrealista, por lo sumergirse en sus profundidades es una aventura en sí misma.
Pero vamos al juego mismo. En un comienzo, Death Stranding parece un simulador de caminata. Los primeros momentos se centran en acompañar a Sam mientras camina de un punto a otro llevando pesadas cargas, desde cuerpos humanos que deben ser incinerados hasta metales preciosos y repuestos de maquinaria. El simulador mismo es de excelente factura, con precisos detalles en el equilibrio en que organizamos la carga, el cuidado al caminar sobre ciertas superficies y el efecto de la inercia en nuestros movimientos. Basta un tropiezo para perder el equilibrio, caer de bruces y dañar los delicados paquetes esperan ser entregados.
A medida que el juego avanza, se suman secuencias de combate y sigilo. Dado que la muerte de un humano puede llevar a una “explosión de vacío”, debemos usar principalmente armas no letales. Tendremos también encuentros con BTs, contra quienes debemos usar armas especiales que utilizan nuestra sangre como munición. A las mecánicas de transporte se suman motocicletas, camiones, drones y otros artilugios que expanden nuestra capacidad de carga y velocidad de traslado.
Adicionalmente, otras mecánicas se suman a lo largo de este viaje. El BB que nos han asignado para detectar entes varados es, en muchos sentidos, especial. Poco a poco la relación entre Sam y BB se hace más profunda, principalmente por el efecto colateral de compartir recuerdos de sus pasados cuado están conectados. En paralelo se desarrollan otras historias, incluida la de un soldado que nos arrastra a su propia “playa” donde nos obliga a revivir combates de guerras pretéritas.
Me faltan palabras para describir la experiencia que significa sumergirse en este juego. Es divertido, extraño, desafiante, perturbador, relajante y frustrante, todo a la vez. La experiencia de caminar por sobrecogedores paisajes llevando nuestra carga puede ser realmente relajante, en particular por la maravillosa banda sonora que acompaña nuestros viajes. Las secuencias de combate son desafiantes y divertidas. Las misiones e historias secundarias son fascinantes. La trama que se nos presenta poco a poco es emocionante y sorpresiva, narrada magistralmente.
En fin, es un juego en el cual es fácil perderse por horas mientras desentrañamos sus misterios, descubrimos los “preppers” que esperan sus a veces superfluos paquetes, combatimos grupos de forajidos que quieren robar nuestra carga, nos arrastramos en silencio por campos llenos de espectros o recolectamos materiales para construir un puente que facilite el cruce de un rio.
Es también un juego que combina la experiencia en solitario con una dimensión social ya que podemos encontrar mensajes dejados por otros jugadores, utilizar sus construcciones, aprovechar sus vehículos abandonados, dejar un “me gusta” en sus señales de advertencia y hasta terminar entregas que otros han perdido en el camino.
Antes de cerrar, unas breves palabras de la “edición del director”. Si bien el juego base es el mismo, esta remozada edición incluye una gran cantidad de mejoras de “calidad de vida”, nuevas misiones, equipamientos y vehículos. Si nunca jugaron Death Stranding, partan con esta versión; y si ya lo jugaron, recomiendo jugarlo nuevamente con estas mejoras.
Death Stranding es una verdadera joya, infaltable en toda biblioteca de jugadores y jugadoras. Si no lo han probado porque alguien les dijo que es solo “un simulador de caminata glorificado”, no hagan caso y sumérjanse en este mundo bizarro y cautivador. No se arrepentirán.
Y si ya lo jugaron, estoy seguro que tal como yo están ansiosos por ver que nos traerá On the Beach. Volver al ”director's cut” me permitió recordar elementos clave de la trama y prepararme para lo que espero serán varias semanas de éxtasis lúdico.
Death Stranding - Director's Cut está disponible en PlayStation, PC (Steam, Epic), iPhone, iPad, Mac y Xbox. On the Beach se lanza el 26 e junio de 2025.
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Todas la imágenes incluidas en este post corresponden a capturas de pantalla generadas por el autor desde una PS5.